Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH): ¿infra o sobrediagnosticado? ¿Infra o sobremedicalizado? Una reflexión
Introducción El trastorno por déficit de atención con/sin hiperactividad (TDAH) constituye la alteración del comportamiento infantil más común en el ámbito de la pediatría y la medicina de familia y se describe como una situación clínica que cursa con tres tipos de síntomas inespecíficos como son déficit de atención, hiperactividad e impulsividad inapropiados para la edad de desarrollo. En 2006 se publicó un boletín INFAC sobre el TDAH en el niño-adolescente1, que abordaba aspectos como el diagnóstico y tratamiento, haciendo hincapié en que se trata de una condición crónica que requiere un abordaje y seguimiento multidisciplinar (médico, psicológico, educativo y social), y en el que el tratamiento es sintomático, no curativo.
Posteriormente, en 2010 se publicó un informe de OSTEBA que analizaba la situación asistencial del TDAH en la CAPV y las recomendaciones terapéuticas2. El apartado de conclusiones de este informe (resumidas en la tabla 1) es muy interesante. El objetivo de este INFAC es hacer reflexionar sobre algunas cuestiones del TDAH como son los motivos y las consecuencias del aumento del consumo de fármacos para su tratamiento (principalmente metilfenidato) así como el uso de estos fármacos en adultos.
Otros aspectos que generan dudas son qué hacer con los pacientes que comenzaron a tomar medicamentos para TDAH en la infancia. ¿Hasta cuándo tienen que seguir con la medicación? ¿Están indicados estos medicamentos en adultos? ¿Qué consecuencias tiene el uso de estos medicamentos a largo plazo?
Sumario