El gobierno chileno quiere autorizar a estaciones de servicios a vender medicamentos

La flamante Ley de Fármacos, aprobada por el Congreso chileno el año pasado, sigue generando controversia en su aplicación. Es que en el mercado más concentrado del planeta (el 80 por ciento de las ventas está en manos de tres cadenas), la norma no termina de mejorar el acceso a los fármacos de los habitantes. Incluso en el marco de la ley desde el ministerio de Economía intentaron autorizar la venta de medicamentos en supermercados, algo que por el momento quedó descartado. Ahora, el ministerio de Salud intentará otra maniobra peligrosa: autorizar a estaciones de servicios a comercializar fármacos.
Según afirmaron los medios locales, el ministerio de Salud de Chile dio a conocer una propuesta que permitiría la venta de medicamentos en estaciones de servicios, que estén ubicadas en autopistas interurbanas. La iniciativa, que se encuentra en periodo de consulta pública, chocaría con la actual Ley de Fármacos, por lo que se aplicaría por un decreto. La nueva propuesta de la cartera sanitaria incluyó “la instalación de almacenes farmacéuticos en comunas donde haya menos de 10 habitantes, comunas donde no existan farmacias y en bordes de autopistas interurbanas”.
El subsecretario de Salud, Jaime Burrows, explicó que la iniciativa se debe “porque muchas veces la gente, cuando está en tránsito, no tiene fácil accesos a estos. Entonces, la idea es facilitar el acceso para ellos, pero dentro de los parámetros que se colocaron”, informó El Mercurio. El requisito será que haya un técnico en farmacia con una oficina especial al interior del local, además de una zona exclusiva diferenciada con barreras físicas del resto de recinto comercial, para evitar contaminación o confusión de productos.
De acuerdo a esta nueva norma en discusión y según el Servicio de Información Municipal de la Subsecretaria del Desarrollo Regional, en casi un tercio de las comunas con menos de 10 mil habitantes se podrían instalar almacenes farmacéuticos. Los municipios coinciden con las 96 comunas del país que no cuentan con una farmacia, por lo que de aprobarse el documento, serían las principales favorecidas. De ampliarse el mercado farmacéutico en promedio los precios de los medicamentos podrían bajar entre un cinco y un 16 por ciento, según un estudio de 2013 del Ministerio de Economía.
Además, Burrows presentó una propuesta para cambiar la Ley de Fármacos, que podría a modificar el reglamento vigente desde febrero de este año. La iniciativa contempla que se fraccionen los medicamentos para vender la cantidad de unidades señaladas por los médicos, las recetas sean certificadas por la Secretaría Regional Ministerial, SEREMI, y que estas mismas lleven una inscripción que informe del genérico que sustituye a la marca. Además, de exigir que los medicamentos bioequivalentes estén ubicados en las góndolas al lado de las marcas con su precio visible para los clientes.
El Presidente del Colegio Médico de Chile, Enrique Paris indicó que la iniciativa que recuerda en la en la receta el medicamento Bioequivalentes, es parte de un compromiso realizado por la institución, que ya está vigente. Y de acuerdo al fraccionamiento de los remedios, explicó que están de acuerdo, sin embargo dejó claro sería mucho más práctico que los municipios tengan medicamentos “de una vez por todas”, y los faciliten a la población.