Una vida con miedo, medicamentos y en el silencio: Paranoia

Como él, en Hidalgo, según la Secretaría de Salud estatal (SSH), 84 personas fueron diagnosticadas con trastorno delirante o paranoia, un padecimiento psicótico caracterizado por la generación de ideas delirantes, durante 2013.
Relata, sentado en una banca en la Ciudad del Conocimiento, antes de ser diagnosticado pensó en suicidarse. Aún mantiene un aspecto triste, cansado, con ojeras.
“Comencé a sentirme observado todo el tiempo, me ponía nervioso y creía que me querían hacer algo, eso hizo que me pusiera violento con la gente que estaba a mi alrededor y al principio nadie hizo caso, pero después se fue haciendo más intenso hasta que agredí a mi hermano y eso hizo que me llevaran con un especialista”, relató el estudiante de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Hidalgo (UAEH).“Me llevaron con doctores, me veían bien, solo decían que tendía a deprimirme, pero que era normal a mi edad y no prestaron atención”, relató.
A pesar de la falta de diagnóstico, platica, se sentía más perseguido y observado. “Era una sensación de temor”. A sus 23 años de edad comenzó a tener conciencia de sus problemas después de una ruptura sentimental.
“Yo pensaba que se trataba porque el novio de la que había sido mi novia me quería pegar, pero no, en las noches, en mi casa, en todos lados me sentía así, no puedo describirlo, pero pedí ayuda”, mencionó el futuro arquitecto, quien después de gritar desesperadamente durante clases fue atendido por un psiquiatra que le diagnosticó paranoia.
Con base en esfuerzo y determinación en superar la enfermedad, el joven ha logrado controlarse y con el medicamento que toma diariamente se siente una persona plena nuevamente.
Norma Angélica Ortega Andrade, profesora investigadora en Salud Emocional de la UAEH, explicó que el trastorno de paranoia se produce cuando una persona que tenía elevada su autoestima, la ve disminuida a consecuencia de alguna frustración que la inhibe y con ello genera los primeros delirios.
De acuerdo con la especialista en salud mental, las personas más vulnerables a presentar dicho problema son los hombres de entre 18 y 30 años, edad en la cual comienzan a presentarse los primeros síntomas caracterizados con un delirio cada vez más agudo.
Según la académica, los problemas derivados de la paranoia pueden ser tratados a través de la ayuda psiquiátrica, pues existen medicamentos especializados que permiten a un individuo sobrellevar una vida saludable.
Aunque no tiene una cura como tal, dicha enfermedad puede tratarse en una persona sin presentar consecuencias mayores.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) catalogó a la paranoia como una de las cinco principales enfermedades mentales que padecen las personas jóvenes a nivel mundial y la tercera para 2030.
La mayoría de las personas que presentan el padecimiento no lo atienden hasta que evoluciona el trastorno.
Ahora, Julián siente que ha recuperado su vida, incluso mejoró sus calificaciones y dejó de gritarle a sus padres, con quienes tiene una mejor relación.
1.-Causas. La paranoia se puede originar en una persona con alta autoestima y orgullo en sí misma, quien puede enfrentar algún tipo de frustración que generará baja autoestima y a su vez delirio. Esto se puede ver reflejado en una ruptura de alguna relación sentimental, la pérdida de un objetivo consciente como un beneficio laboral, académico o profesional.
2.- Tratamiento. Una persona que comienza a percibir delirio de persecución debe acudir con un especialista como psicólogo para que determine y posteriormente canalice a una persona con un psiquiatra. Se requiere de la colaboración y el interés de una persona para reponerse del problema.
3.- Consecuencias. Una persona con paranoia puede agredir a otra física o verbalmente y puede romper sus relaciones sentimentales, familiares y sociales. Puede provocar bajo desempeño escolar y laboral generar baja autoestima, así como deseos de autodestrucción.