México: Pacientes podrán obtener Morfina sin tantas trabas
Los pacientes con enfermedades terminales o avanzadas podrán acceder más fácilmente a la morfina, droga legal que se encuentra controlada, y que sirve para disminuir el dolor agudo, pero que muchos mexicanos no la podían obtener, debido a los candados que existían.
Con las nuevas medidas, afirmó Mikel Arriola Peñalosa, responsable de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), habrá más doctores que podrán expedir medicamentos controlados, básicamente morfina, más farmacias que puedan surtir estos productos y más dosis que permitirán abatir el desabasto que se presenta de estos productos.
El Diario Oficial de la Federación público ayer la nueva Norma Oficial Mexicana para la Atención de Enfermos en Situación Terminal a través de Cuidados Intensivos.
El funcionario declaró que por acuerdo del Consejo de Salubridad General, se aprobaron nuevas medidas, que entrarán en vigor a partir del primero de enero de 2015, por lo que ahora cualquier médico, que pida su registro ante la Cofepris, podrá acceder a un talonario de recetas, las cuales serán controladas de manera electrónica.
Mikel Arriola recordó que antes cuando un enfermo terminal necesitaba un medicamento para el dolor tenía que conseguir un médico que tuviera el permiso ante la Cofepris, que principalmente eran especialistas, para que le consiguiera la receta, que tenía que estar avalada por ese organismo.
Después, el paciente tenía que ubicar la farmacia donde tuvieran libros escritos y tenía que localizar al distribuidor para pedirle el fármaco controlado, “y que se arriesgara a una regulación tan rígida como es la distribución de medicamentos controlados, y mientras, el enfermo continuaba con su dolor”.
Reconoció que el cúmulo de deficiencias y dificultades en el proceso incrementaba la falta de acceso a estos fármacos para los pacientes.
El funcionario mencionó que la morfina y otros medicamentos son productos clase uno o clase dos, que son controlados, y que estaban sujetos a medidas como libros de control y recetarios, y que estaban restringidos para su otorgamiento.
Destacó que los recetarios contenían los nombres de los médicos, lo que les generaba una preocupación a los doctores por su seguridad.
Mikel Arriola explicó que se realizarán cuatro procesos: primero se van a controlar los libros en un modelo electrónico al que pueda acceder cualquier distribuidor, importador o farmacéutico y con esto se bajará de manera considerable el tiempo para administrar este tipo de medicamentos.
“Se van a incrementar los incentivos hacia los farmacéuticos para que haya más medicamentos controlados, morfina básicamente”, adelantó.
Segundo, agregó, los doctores van a poder acceder al recetario de la Cofepris, de manera electrónica, con lo que duplicará el numero de recetas, ya que se pasará de 50 a 100 recetas por talonario. Antes, precisó, estaba limitado a 50.
Tercero, continuó, ya no aparecerá el nombre del médico en la receta, únicamente una clave digital, que se va a poder leer con cualquier mecanismo con conexión a internet en las farmacias, para corroborar que es un doctor certificado.
Y como cuarta medida, dijo, en el último semestre del año se generó un equipo con el Instituto Nacional de Cancerología, así como con diversos institutos y hospitales regionales coordinados por la Cofepris y la industria farmacéutica, para poder localizar rápidamente dónde hay morfina.
“Si se presenta un problema de morfina y no hay en ese estado, se le pregunta a las tres fases de la industria: manufactura, distribución y dispensación dónde tiene morfina”, destacó.
Mencionó que se cuenta con una reserva de 70 mil dosis, que están a las órdenes de los Institutos Nacionales de Salud y hospitales, en las que son principalmente solicitadas para enfermos con cáncer o para pacientes con enfermedades terminales.
El responsable de la Cofepris dijo que el principal problema de los estados era que las oficinas de Riesgos Sanitarios locales eran las encargadas de expedir los recetarios y tenían deficiencias administrativas. Había estados muy buenos, pero también estados muy malos. “Hoy la Federación toma directamente este asunto y a partir de un mecanismo electrónico se podrán emitir los recetarios para que no se corte el proceso de distribución de recetas y dispensación”, aseguró.
Según investigaciones del Instituto Nacional de Cancerología (INcan), 50% de los casos en México no recibe tratamiento cuando enfrentan dolor crónico y 30% de los que sí tienen receta farmacológica sufre porque les asignan medicamentos inapropiados. Además, 25% de los pacientes fallece finalmente con dolor intenso.