Científicos japoneses podrían haber encontrado la solución a uno de los miedos más comunes entre la población mundial.
Redacción Actualidad/El Espectador-
El miedo extremo a las agujas es conocido con el nombre de belenofobia y de acuerdo con las estadísticas que maneja el portal de medicina healthline.com, una de cada cinco personas padece esta fobia. Si bien esta podría ser la razón por la que cientos de personas no se vacunan contra enfermedades peligrosas o evitan a médicos y hospitales, las inyecciones sirven para evitar enfermedades que podrían ser mortales.
Por eso, científicos de la Universidad de Osaka (Japón) se han puesto en la tarea de desarrollar un dispositivo que tenga la misma función que una vacuna pero que evite, en la mayor medida posible, el dolor que produce una aguja al penetrar en la piel. En un estudio publicado esta semana en el portal científico ‘Biomaterials’, los investigadores aseguran que el experimento con un parche de microagujas ha sido todo un éxito.
El periodista de la revista Good, Rafi Shwartz, explica que se trata de un método que utiliza microagujas diminutas y biodegradables hechas de ácido hialurónico, una sustancia natural que se encuentra en las articulaciones del cuerpo. “El parche donde se encuentran las microagujas es del tamaño de una moneda y un paciente simplemente lo fija en su brazo permitiendo que la punta de las agujas atraviesen solamente las primeras capas de la piel”, agrega Shwartz.
Si bien esta no es la primera investigación concentrada en desarrollar microagujas y evitar el dolor de las inyecciones, este estudio se convierte en el precursor de una tecnología biodegradable que evita la utilización de materiales como el metal y plástico, comunes en agujas tradicionales, que son peligrosas pues se pueden romper o quedar atrapadas dentro de la piel.
El experimento, bautizado como “MicroHyala”, es tan fácil de aplicar que podría ser una herramienta útil en países donde el personal médico es reducido. El parche, aunque solamente se ha probado exitosamente con vacunas en contra de la gripa, como lo asegura el autor de este experimento, Shinsaku Nakagawa, podría ser utilizado con muchos otros antídotos y de ser regulada su utilización, podría cambiar la manera cómo se administran las vacunas en todo el mundo.
Origen: Chao, agujas; adiós, dolor