actasanitaria.com.- “La industria farmacéutica tiene las riendas de una vasta, y bien provista de recursos, maquinaria de lobby en Bruselas, disfrutando de un acceso casi sistemático a quienes toman las decisiones en la Comisión Europea. Esto engendra serios temores sobre la excesiva influencia de las grandes farmacéuticas en la toma de decisiones de la UE, en perjuicio de la salud pública y la justicia comercial”, señala, entre sus principales conclusiones, un informe sobre la relación entre los laboratorios farmacéuticos y la Unión Europea, y su impacto en la salud pública, realizado por el Observatorio de las Corporaciones Europeas (CEO).
La industria farmacéutica, incluyendo las empresas, las asociaciones y diez principales firmas de cabildeo que emplean estas compañías, tiene un gasto declarado, según revela el texto con base en el Registro de Transparencia de la Unión Europea, de casi 40 millones de euros. Eso es, agrega el informe, alrededor de 15 veces más que el gasto de lobby de la sociedad civil y los grupos de consumidores que trabajan en el área de la salud pública y el acceso a los medicamentos.
El documento también expone que aunque muchos actores de la industria farmacéutica declaran actualmente un gasto más realista de lobby que hace tres años, el gasto real puede ser mucho mayor. Así, las diez empresas farmacéuticas que más gastan en este aspecto ahora declaran 6.000.000 de euros más que en 2012 y, por su parte, las asociaciones comerciales europeas de la industria farmacéutica declaran siete veces más.
Más de 50 reuniones en cuatro meses y medio de la Comisión Junker
Reuniones extensas con los responsables políticos, incluyendo más de 50 reuniones entre la Federación Europea de Asociaciones de la Industria Farmacéutica (EFPIA) en los primeros cuatro meses y medio de la Comisión Juncker y la participación en grupos consultivos de ésta última institución europea, son “algunos de los canales de influencia que la industria farmacéutica utiliza para promover sus intereses”, destaca el documento.
“Uno de los ejemplos más claros de las consecuencias políticas de la potencia del lobby farmacéutico es la forma en que el secreto en torno a los resultados de ensayos clínicos está siendo impulsado por los grandes grupos de presión de la industria farmacéutica en el TTIP”, según el análisis del CEO, con respecto al tratado comercial que se negocia entre Europa y los Estados Unidos.
“Un reequilibrio importante de intereses se necesita con urgencia, empezando por una total transparencia sobre el cabildeo de la industria y su influencia”, con el fin de servir a las genuinas necesidades de la salud pública y verdaderamente facilitar el acceso a los medicamentos esenciales en el mundo entero, concluye el texto del Observatorio de las Corporaciones Europeas , y agrega que “esto sólo puede hacerse a través de un realmente obligatorio registro de lobby de la UE, que sea tanto supervisor como sancionador”, entre otros aspectos.