Arnica Montana
Arnica chamissonis
Arnica es un género con unas 30 especies de plantas perennes, herbáceas, que pertenecen a la familia de las asteráceas.
Etimología
El nombre del género Arnica es una deformación latina que deriva del griego πταρμική (pragmique), del sustantivo πταρμός (pragmos), estornudo, por su capacidad de hacer estornudar.
Descripción
Las especies del género Arnica tienen un escape floral largo (50-100 cm) y erecto, generalmente sin ramificar o poco ramificado. Tienen las hojas velludas y opuestas, pecioladas o sésiles. Estas son de forma muy variable: ovaladas, cordiformes, deltoides, elípticas,lanceoladas o lineales; los bordes son enteros o denticuladas, raramente ligeramente lobulados. Las caras son glabras, hirsutas, hispídulas, peludas, tomentosas o lanudas. Además, existe a menudo una roseta basal. Desarrollan un capítulo grande, en relación al resto de la planta, de color amarillo o naranja. Las cabezas tienen de 6 a 8 cm de diámetro.
Las brácteas involucrales son peludas y dispuestas en una o dos filas. Cada capítulo tiene entre 5 y 20 flores liguladas y, en el disco del receptáculo, que es obcónico/hemiesférico, alveolado y cortamente lanudo, los flósculos son numerosos (hasta 120) y hermafroditos. Los frutos son cipselas homogamas, alargadas y estrechas, más o menos hirsutas y longitudinalmente surcadas, coronadas por un vilano, generalmente caedizo, de cerdas finas insertadas en un anillo apical, denticuladas o subplumosas a plumosas, de color marrón, rojo, blanco o amarillo pálido.1
La planta tiene un leve olor aromático.
La poliploidia and apomixis son comunes, resultando en una considerable variabilidad morfológica.
Hábitat y distribución
Género circumboreal y de montaña (sub-alpino) que se presenta principalmente en las regiones templadas del oeste de América del Norte y prados o zonas de pastos de montaña, con al menos dos especies originarias de Eurasia: Arnica angustifolia y Arnica montana. Tiene numerosos endemismos, su hábitat son las zonas frías desprovistas de cal, con suelos ácidos y pobres en nitrógeno. La mayoría de especies ha evolucionado para protegerse del frío. Prefiriendo zonas soleadas y resguardadas del viento.
El género es muy sensible a la eutrofización de los suelos, esto es, a su contaminación por usos industriales o por nitratos procedentes del ganado, incluso sucumbe a las deposiciones aéreas de las aves. La contaminación de muchas montañas europeas ha llevado a la extinción de especies endémicas y están consideradas las restantes en peligro de extinción. El género no tolera los suelos calizos, por lo cual es inexistente en muchas partes de España, Italia y Grecia.
Sus especies están protegidas en muchos países europeos por su escasez debida a sus altos requerimientos ecológicos y estar además en trance de extinción debido a su recolección furtiva para su venta como remedio medicinal.
Algunas larvas de lepidópteros (como Bucculatrix arnicella) se alimentan de plantas de este género.
Especies aceptadas de Arnica
El género tiene unos 35 taxones específicos y 7 infra específicos aceptados, de los más de 440 descritos,2 los otros son prácticamente todos sinónimos.
Arnica acaulis (Walter) “Britton, Sterns & Poggenb.”
Arnica angustifolia Vahl non Turcz. ex Ledeb.
Arnica attenuata (Greene) Maguire
Arnica cernua Howell
Arnica chamissonis Less.
Arnica cordifolia Hook.
Arnica dealbata (A.Gray) B.G.Baldwin
Arnica denudata Greene
Arnica discoidea Benth.
Arnica fulgens Pursh
Arnica gracilis Rydb.
Arnica griscomii Fernald
Arnica intermedia Turcz.
Arnica lanceolata Nutt.
Arnica latifolia Bong.
Arnica lessingii (Torr. & A.Gray) Greene
Arnica lonchophylla Greene
Arnica longifolia D.C.Eaton
Arnica louiseana Farr
Arnica mallotopus (Franch. & Sav.) Makino
Arnica mollis Hook.
Arnica montana L.
Arnica nevadensis A.Gray
Arnica ovata Greene
Arnica parryi A.Gray
Arnica porsildiorum B.Boivin
Arnica rydbergii Greene A
Arnica sachalinensis (Regel) A.Gray
Arnica sororia Greene
Arnica spathulata Greene
Arnica unalaschcensis Less.
Arnica venosa H.M.Hall
Arnica viscosa A.Gray
Usos
Varias especies, como Arnica montana y Arnica chamissonis contienen helenalina, una lactona que es un ingrediente esencial en preparados antiinflamatorios usados en su mayoría contra las contusiones y magulladuras.
Su uso medicinal, como el de estimular el sistema nervioso y el cerebro, no se ha fundamentado.
Macerar sus flores en aceite de oliva es un remedio para muchas personas del campo contra los golpes con hematoma o torcedura.
La recolección tiene lugar después de la floración. Dada la toxicidad de la flor, conviene conservar solamente las hojas. Arnica montana se ha utilizado medicinalmente durante siglos, sin embargo no hay estudios científicos que demuestran su eficacia médica. Las raíces contienen derivados del timol, que se utilizan como fungicidas y conservantes. Se utiliza actualmente en la preparación de linimentos y pomadas utilizadas para torceduras, esguinces y contusiones. Se utilizan además preparaciones comerciales de árnica. Los derivados del timol que se concentra en las raíces de las plantas han sido clínicamente probados como vasodilatadores efectivos de los capilares sanguíneos subcutáneos. La planta puede ser fumada en forma de sustancia negra de olor dulce y agradable. Las hojas reducidas a polvo son estornutatorias.
Referencias
[1]Arnica en Flora of North America
Arnica en The Plant List, vers, 1.1, 2013
Bibliografía
Maguire, B. 1943. A monograph of the genus Arnica (Senecioneae, Compositae). Brittonia 4: 386–510.
Wolf, S.J. & K.E. Denford. 1984. Taxonomy of Arnica (Compositae) subgenus Austromontana. Rhodora Journal of the New England Botanical Club 86(847): 239 – 309.
Nordenstam, B. 1977. Senecioneae and Liabeae—systematic review. In V. H. Heywood, J. B.
Harborne, and B. L. Turner [eds.], The biology and chemistry of the Compositae, vol. II, 799–830. Rhodora 86: 239–309.
Downie, S. R. and K. E. Denford. 1988. Taxonomy of Arnica (Asteraceae) subgenus Arctica. Rhodora 90: 245–275.
Gruezo, W. S. and K. E. Denford. 1994. Taxonomy of Arnica L. subgenus Chamissonis
Maguire (Asteraceae). Asia Life Sci. 3: 89–212.