Aunque se pensaría que la tercera sustancia que más se consume en los centros penales después del tabaco y la marihuana, es el crack, esto no es así, esta posición la poseen los medicamentos sin prescripción.
Rodríguez explicó el riesgo que los reclusos no ven los medicamentos como una sustancia que puede generar adicción.
Andrés Rodríguez, jefe de la Unidad de Información e Investigación del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD), explicó que los medicamentos como el diazepam y el cloracepam están en el tercer puesto, esto obedece posiblemente a circunstancias emocionales que los reclusos buscan subsanar.
Asimismo, indicó que muchos de los privados de libertad que los consumen no lo hacen bajo prescripción de un médico, sino que a aveces los obtiene de manos de otros reos que se los regalan o los comercian.
El especialista dijo que uno de los problemas es que la población penitenciaria, así como la misma sociedad, no ve a los medicamentos como una sustancia que puede producir adicción.
En opinión de Rodríguez, la forma correcta de combatir esta problemática es que exista un mayor control en la entrega de los medicamentos, de modo que un profesional se cerciore de que los reos consuman la dosis y el medicamento indicado.
“La recomendación es muy concreta: los psicotrópicos de uso médico no se deben dar en toda la dosis de un mes, debe irse administrando directamente a las personas, esto por medio de un enfermero”, concluyó el especialista.
Origen: Medicamentos son la tercera sustancia que más se consume en prisión