Los virus se ponen de moda y aterrorizan al mundo
UN| Narkys Blanco, Caracas. Infecciones, muertes, malformaciones genéticas, alteraciones cromosómicas, retroceso en la humanidad y el síndrome de Guillain-Barré son algunas de las consecuencias que se les achacan a los virus que han pasado en los últimos años por muchos países del mundo.
Ébola, dengue, chikungunya, gripe por AH1N1 y recientemente zika han puesto a temblar a más de uno por las informaciones que se trasmiten por redes sociales, medios de comunicación y hasta agencias internacionales de noticias.
Hasta ahora, no se había establecido una relación tan directa entre conceptos como el desarrollo de posibles enfermedades en el feto y el aborto como solución, como sucede actualmente con la propagación del zika. Sin embargo, muchos científicos señalan que la evidencia aún no es concluyente, lo cual ha generado una intensa polémica.
Todos los virus anunciados han servido para atemorizar a la población por las diversas características que presentan y que en su mayoría son maximizadas por los medios de comunicación y las grandes industrias farmacéuticas.
Según un estudio realizado por el periodista británico Jon Rappoport, el zika ha servido como escudo para encubrir el daño que hacen las grandes corporaciones de pesticidas en Brasil y que el pánico puede causar más daño que el propio virus.
“Por sus cultivos, es el país (Brasil) que más pesticida utiliza en el mundo. La atrazina (compuesto que tienen estos químicos agrícolas) está muy vinculada con la microcefalia”.
Cabe destacar que los investigadores cariocas solo han podido confirmar 270 casos de microcefalia y no cuatro mil como se aseveró en un principio y se replicó por todo el planeta.
No hay nada nuevo. Eduardo Samán, reconocido farmacéutico y director del portal www.arsenalterapeutico.com, explicó que la mayoría de estos virus guardan el mismo patrón científico y también comunicacional.
“El despliegue informativo consiste en impulsar el sensacionalismo con la enfermedad en vez de prevenir. El zika es un virus causado por el mismo vector que transmite el dengue y la chikungunya, (el zancudo Aedes aegyptis, conocido como patas blancas).
Entre las aparentes consecuencias de la enfermedad está la posibilidad de dar a luz bebés con microcefalia, un trastorno neurológico en el que la circunferencia de la cabeza es menor que el promedio para la edad y el sexo del infante.
Explica Samán que los organismos internacionales no han probado la relación directa entre el zika y la microcefalia, “en el caso de Brasil hay varios elementos que influyen para minimizar la gravedad del problema, uno es el uso de pesticidas en zonas agrícolas”.
Eso fue reflejado por la Directora General de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Margaret Chan, a principios de este mes, “la causa más evidente de los defectos congénitos observados en esta zona es el contacto directo y la absorción de pesticidas”.
Samán agrega que estos químicos pueden generar efectos en fetos y no necesariamente el virus porque aún no hay casos comprobados en otros países, más allá de uno ocurrido en Liubliana, Eslovenia, según estudio realizado en el Instituto de Patología de la Facultad de Medicina de dicha ciudad.
El farmacéutico asegura que también en Brasil influye la aplicación de una vacuna Tdap (tétano, difteria y tosferina acelular) que se aplicó a mujeres embarazadas. “Se administró el medicamento y puede asociarse a la microcefalia ya que a finales de 2014, el Ministerio de Salud de Brasil anunció la introducción de la vacuna para todas las mujeres embarazadas en ese país como parte de su programa de vacunación de rutina”.
Luego, en diciembre de 2015, el gobierno brasileño declaró una emergencia después de que se encontraron 2.400 bebés nacidos con cabezas reducidas.
El marketing del miedo. El especialista manifiesta que cuando se conocieron los primeros casos de la gripe aviar en el mundo, la recomendación era lavarse las manos con antibacterial, luego con la chikungunya se instruyó tomar acetaminofén. Ahora para el zika hay que adquirir Atamel. “En cada uno de los casos, los productos recomendados se agotaron rápidamente y comenzaron a escasear por algún tiempo. En Argentina, por ejemplo, ya no se encuentran repelentes”, denunció.
“En el fondo, se busca una crisis humanitaria porque aún no hay un diagnóstico claro que determine el virus, simplemente una semejanza en los síntomas”, reflexionó.
En 2010, la eurodiputada ecologista francesa Michele Rivasi dijo que con la AH1N1 hubo una manipulación y puesta en escena por parte de la OMS, y la calificó como “la crónica de una epidemia anunciada” que escondía el interés económico de la industria farmacéutica.
En Venezuela, como en la mayoría de los noticieros del planeta, se anuncian y comentan informaciones con poca o ninguna referencia clínica certificada sobre esta enfermedad. Cobra peso la vieja sentencia periodística: Las malas noticias siempre venden.
A principios de este mes, la OMS declaró el virus como emergencia mundial y recientemente apoyó el uso de mosquitos transgénicos para erradicar el vector.
“Dada la magnitud de la crisis del zika, la OMS anima a los países afectados a aumentar el uso de técnicas de control de mosquitos, tanto viejas como nuevas, como la línea defensiva inmediata”.
La medida encendió alarmas y restricciones, de viajes sobretodo. Inmediatamente se activó la búsqueda de financiamiento. La OMS lanzó este miércoles un llamado para recaudar 56 millones de dólares para la lucha contra el virus.
Como anillo al dedo. Con la excusa de ayudar en la erradicación de algunas enfermedades trasmitidas por estos virus se han invadido países, explicó el internacionalista Miguel Castro Ruiz.
Liberia, Sierra Leona y otros, han sufrido de epidemias como el ébola y han recibido de forma directa tropas de EEUU.
Destacó que para justificar una invasión deben existir algunas razones ligadas a los derechos humanos o incapacidad para controlar enfermedades que atenten contra su población y el zika es la más indicada.
El virus del terror. Las alarmantes noticias han puesto en riesgo la participación de algunas delegaciones a los Juegos Olímpicos de Río 2016 por temor a contagiarse.
El Comité Olímpico de Estados Unidos (Usoc) afirmó que sus atletas pueden considerar no competir en la cita. La portera de su selección de fútbol, Hope Solo, no está segura de asistir porque le preocupa su futuro embarazo.
Igualmente, algunos integrantes del equipo británico solicitaron cambiar el lugar de concentración y la delegación de Kenia está considerando seriamente su asistencia a la cita deportiva.
Por su parte, el médico jefe de la misión olímpica venezolana, Joseba Barreda, descartó la alarma en la delegación por el virus.
A Venezuela llegó por brasil
En el caso de Venezuela, la enfermedad ingresó por la frontera con Brasil, aseveró Elia Sánchez, presidenta de la Sociedad Venezolana de Infectología.
Dijo que la enfermedad comenzó en Tanzania y al principio se creyó que era fiebre amarilla.
Criticó la forma irresponsable en que se ha tratado el caso en las redes sociales. “El zika no es un virus modificado y mucho menos inoculado, como se ha corrido irresponsablemente. Es solo un reflejo de lo que ocurre en el mundo”, afirmó Sánchez.
Esta semana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró que los ensayos clínicos de vacunas a gran escala no deberían comenzar antes de por lo menos 18 meses y en semanas o meses podrá establecerse si el virus del zika es causante de los casos de microcefalia en Brasil y del síndrome neurológico de Guillain-Barré, explicó Marie-Paule Kieny, adjunta de la OMS.
A su vez, el grupo farmacéutico estadounidense Inovio Pharmaceuticals anunció que probará una vacuna a finales de este año.
La alerta mundial ha promovido el aborto y los anticonceptivos
Ante la alta incidencia de zika en algunas zonas, varios países han tomado medidas extremas para evitar los embarazos, incluso sugiriendo el aborto. Otros han propiciado el uso de anticonceptivos como una solución por la supuesta relación con la microcefalia que se ha presentado en bebés.
Por esa razón, el papa Francisco tildó de “crimen” autorizar el aborto a las mujeres afectadas por el virus del zika, tal como lo ha recomendado la Organización de Naciones Unidas (ONU), y consideró la anticoncepción como “un mal menor”. El organismo instó en febrero a los países afectados por el zika a autorizar el aborto ante su probable relación con malformaciones en los fetos y problemas neurológicos.
Hizo una clara distinción entre ambos. “No hay que confundir el mal que representa evitar el embarazo con el aborto. El aborto no es un problema teológico. Matar a una persona para salvar a otra es una maldad humana, no un mal religioso”, insistió.
Antes, agrupaciones de católicos le habían solicitado al Pontífice permitir ambos métodos. La solicitud se produjo al tiempo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) les aconsejó a las mujeres, sobre todo durante el embarazo, usar mosquiteros y otras formas de protección contra los zancudos.
“Todos los hombres y mujeres que viven o regresan de áreas donde el zika está presente, especialmente las embarazadas y sus parejas, deben recibir consejos sobre los riesgos potenciales”, agregó la organización.
Catholics for Choice (Católicos por el Derecho a Decidir), un grupo con sede en Washington, DC, dijo en un comunicado: “Le pedimos, Francisco, que aclare ante sus hermanos obispos que las buenas católicas pueden seguir su propia conciencia y usar métodos anticonceptivos para protegerse a sí mismas y a sus parejas”.
Le pidieron también al primer Sumo Pontífice latinoamericano que asuma una postura a favor de las mujeres vulnerables: “Las decisiones de las mujeres en torno al embarazo, incluida la decisión de interrumpirlo, son dignas de respeto y no de condenación”.
Sin embargo, la discusión sobre los verdaderos alcances del virus continúa. Las dudas se centran en la desigual distribución de las enfermedades y anomalías congénitas en las diversas zonas donde se presenta. Casi todos los casos vinculados se encuentran en la región noreste de Brasil.
Asimismo, en otras partes no parece que el brote de zika haya tenido el mismo impacto.
En la vecina Colombia, que cuenta con más de 31 mil casos de zika, incluyendo al menos cinco mil mujeres embarazadas, no ha habido el mismo fuerte aumento en las deformidades fetales. Allí, el virus está más estrechamente asociado con el síndrome de Guillain-Barré, un fallo en el sistema inmune que puede causar parálisis y muerte.
Investigadores y analistas opinan que el pánico actual sobre el zika es una señal de lo mal preparados que el mundo está para ese tipo de epidemias. Indican que siempre están luchando contra el último brote en lugar del siguiente.
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