Nueve turistas jóvenes, entre ellos un italiano y cinco franceses, fueron hospitalizados en “acceso delirante” después de haber “olfateado” la escopolamina, un potente fármaco alucinógeno que se utilizará en dosis muy bajas.
Un paquete llegó de Nueva York. Parecía un “regalo”, llamémoslo así. Un contenedor de aluminio en el que había algo que se parecía a la cocaína. En cambio, era una medicina muy peligrosa si se toma sin recetas claras.
Conclusión: nueve jóvenes turistas, entre ellos un italiano, un alemán y cinco franceses, fueron admitidos en un hospital de Australia Occidental, en Perth, víctimas de “delirios” después de “olfatear” la poderosa droga alucinógena, para ser utilizados sin embargo en dosis muy pequeñas y con precaución – confundido con «nieve». Si no hubiera sido por una intervención médica oportuna, habrían arriesgado seriamente sus vidas; dos franceses y uno alemán, sin embargo, todavía están en el hospital a pesar de que han pasado la fase alarmante. El día anterior, sus condiciones habían sido descritas como “críticas” por David McCutcheon, un médico de emergencia citado por el periódico “West Australian”. Los mismos médicos habían sido llamados a última hora del martes por la noche por los propios turistas, todos los huéspedes en una villa donde habían venido a mochilear en las afueras de Perth. Una vez que fueron llevados al hospital, después del análisis se entendió que habían tomado escopolamina, utilizada como antidepresivo y como “preanestésica”, antes de caer en un estado de inconsciencia o semiinconsciente. “Muchos de ellos habrían muerto sin nuestra intervención oportuna”, dijeron los médicos. Los nueve ingresaron en el hospital con “ataques de delirio emocionado”. “Estaban alucinados, sus corazones latían demasiado rápido, tuvimos que dejarlos”.
Extremadamente tóxico
Según la policía y el hospital, el fármaco “sniffato” es la escopolamina que, sin embargo, debe usarse en dosis muy pequeñas porque es extremadamente tóxico. Unos pocos microgramos más de lo esperado (generalmente en forma de polvo) pueden causar delirio, alucinaciones, coma. Y la muerte Imagine a estos turistas que la contrataron como si fuera cocaína. Lo que sucedió fue contado por el turista italiano en el oeste de Australia: un paquete que contenía la droga había llegado a su casa, dirigido a una persona que, según decían, ya no vivía allí. Al abrir la envoltura, el grupo de niños vio esos paquetes marcados con la palabra “primicia”. Entonces, creyendo que era cocaína, todos “silenciosamente” olieron la escopolamina. Poco después llegó la fase de descenso. “Fuimos impotentes, no pudimos hacer nada” fue uno de sus testimonios. Un vecino le dijo a un televisor que las víctimas estaban molestas: “Estaban vidriosos cuando los llevaron en una camilla”.“Fue una locura, muchos de ellos temblaban e intentaban bajarse de la camilla, estaban delirando”, dijo un testigo.