En Argentina ya se están fabricando medicamentos por medio de la impresión 3D. La iniciativa es de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba, quien solicitó la confección del equipo a una pyme nacional con el objeto de facilitar la producción de medicamentos no masivos.
La impresora 3D de medicamentos permite producir pastillas y cápsulas a partir de diseños de computadora. Los materiales usados para la impresión son sustancias biocompatibles, como lípidos o grasas y polímeros hidrosolubles, que son de uso extendido en la industria farmacéutica.
La ventaja inicial es que no se requieren moldes y que se puede elegir y variar la forma y la ubicación de los componentes con mayor facilidad. Esto es importante, ya que la geometría de un comprimido y la estratificación de las sustancias que lo componen inciden en la liberación de su principio activo al ingresar al organismo.
Otro de los principales beneficios que podrán obtenerse a partir de la masificación de esta tecnología aplicada a la fabricación de medicamentos es la personalización. Las dosis de los principios activos y la conformación de los excipientes que integran la fórmula podrán seleccionarse a medida de cada paciente, incluyendo las cantidades y combinaciones de drogas precisas y excluyendo lo que es innecesario o perjudicial para esa persona.
La empresa encargada del diseño y fabricación de la impresora 3D, así como del software necesario para su funcionamiento, fue Life Soluciones Integrales. Si bien por el momento el equipo es un prototipo hecho a medida para la Universidad Nacional de Córdoba y está aún en proceso de mejora, aspiran a confeccionar máquinas con funciones más simples pero con el mismo fin para ser usadas en farmacias y hospitales públicos.
Origen: Impresión 3D de medicamentos. Remedios a medida – Trimaker