El mandatario Donald Trump firmó una orden ejecutiva en la que establece la compra de medicamento esenciales a compañías estadounidenses y no extranjeras. El anuncio se da poco después del acuerdo histórico entre el gobierno federal y la empresa Kodak Pharmaceuticals para la fabricación de fármacos y suministros médicos en medio de la pandemia de coronavirus.
«No podemos confiar en China y otras naciones que podrían negarnos los medicamentos», dijo Trump durante su viaje a Ohio este 6 de agosto. Asimismo destacó los esfuerzos de la administración para producir suministros esenciales y farmaceúticos para el mercado nacional. El asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, elogio la nueva orden que requerirá que el gobierno elabore una lista con medicinas esenciales para su adquisición, además de eliminar algunas regulaciones a las farmaceúticas estadounidenses.
«Si algo hemos aprendido de la pandemia del virus de China es que somos peligrosamente dependientes de las naciones extranjeras para obtener nuestros medicamentos esenciales y los insumos médicos como máscaras, guantes, lentes y ventiladores», expresó el funcionario sobre esta orden que, según detalló, acelera las revisiones de ciertos ingredientes para los medicamentos por parte de la agencia reguladora FDA.
Navarro aseguró que la decisión también combatirá la importación de medicamentos falsos que son comercializados en la páginas web. Esta orden se anuncia meses después de que las autoridades sanitarias advirtieron sobre la escasez de fármacos recetados y suministros médicos críticos, una situación que se vio agravada debido a que algunos de los ingredientes farmaceúticos se producen principalmente en China, con quien la administración Trump mantiene tensas relaciones diplomáticas.
La pandemia sigue dejando números récord en Estados Unidos, donde cerca de 5 millones se han han contagiado del virus y más de 156.000 han perdido la vida. La coordinadora del equipo de trabajo de la Casa Blanca, la médico Deborah Birx, opinó sobre la crisis sanitaria y advirtió sobre una fase nueva y peligrosa. Al mismo tiempo insistió en que el virus está «extremadamente extendido» en el país y representan un peligro mayor respecto a los primeros meses de la emergencia.