Un estudio publicado en la revista Nature demuestra que el SARS-CoV-2 podría mutar, evolucionar, evadir anticuerpos y el tratamiento en personas inmunodeprimidas que se encuentran en terapia de COVID a largo plazo.
En el estudio de caso, los investigadores dijeron que las proteínas Spike del virus, que el virus utiliza para infectar otras células, mutaron en un paciente de cáncer de 70 años que tomó remdesivir, esteroides y plasma convaleciente. “El virus evolucionaba muy rápido y se adaptaba a los tratamientos, especialmente al plasma”, dijo David Pollock, uno de los coautores del estudio.
“Existen varios casos que apoyan la idea de que el plasma provocó la selección en la variante. Y la variante recién desarrollada protege contra el plasma convaleciente”.
Pollock también dijo que algunas de las nuevas cepas de virus que se informan en las noticias tienen algunas de las mismas mutaciones que se observaron en el paciente del estudio.
Origen: Las mutaciones de COVID ocurren en personas inmunodeprimidas