Buenos Aires compró una partida de misoprostol para garantizar abortos en el sistema público
Recomendado desde hace años por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para interrumpir embarazos de manera segura, el misoprostol ganó fama hace dos años cuando se debatió en el país la ley de legalización del aborto. A partir de esto, comenzaron a producirse una versión nacional y una pública, que extendieron su uso y rompieron el monopolio de la industria farmacéutica privada. Con el nuevo proyecto legislativa en el horizonte, la provincia de Buenos Aires compró por primera vez una partida del tratamiento, para garantizar abortos en el sistema público, de acuerdo al protocolo vigente. Se trata de 80 mil comprimidos de misoprostol producidos por el Laboratorio Industrial Farmacéutico de Santa Fe (FIL), con costo final de unos 15 millones de pesos. La cartera sanitaria a cargo de Daniel Gollán agregó que ese monto significa un ahorro de 18.343.400 pesos en comparación con el valor de mercado, debido a que se trata de un productor público de medicamentos. “Es la primera vez que se realiza una compra planificada de esta magnitud para garantizar el derecho a la ILE en el sistema de salud provincial”, destacó Gollán. Se trata de una compra planificada para que no falte este medicamento por los próximos seis meses, ya que hasta ahora el Ministerio de Salud bonaerense y los efectores de salud realizaban compras esporádicas de esta medicación.
Las autoridades sanitarias aseguraron que al asumir la gestión no encontraron “datos estadísticos precisos ni confiables sobre la cantidad de interrupciones legales del embarazo en el sector público, ni antecedentes de compras recientes de misoprostol”. En el período 2014-2018 se registraron 79 muertes de mujeres a causa de un aborto en la provincia de Buenos Aires, aunque se trata de un dato que está subregistrado, es decir, que es muy inferior al número real. A su vez, el 10 por ciento de esas muertes correspondió a niñas y adolescentes de 15 a 19 años y el 80 por ciento de los decesos fue producto de prácticas clandestinas. Ante la escasa información disponible, la adquisición actual se estimó a partir de diversas variables, entre las que se incluyen los egresos hospitalarios por aborto en hospitales públicos bonaerenses en 2018; las compras registradas en el Sistema Informático para Adquisición y Contrataciones Hospitalarias (Sipach) durante 2017 y 2018; el aumento de la demanda que se estima en función de la adhesión al Protocolo Nacional; y la ampliación de servicios de atención de ILE, principalmente en el primer nivel de atención.
“En tanto no se sancione una nueva legislación al respecto, de acuerdo a lo establecido por el Código Penal en su artículo 86 incisos 1 y 2 el aborto es legal en Argentina toda vez que el embarazo ponga en riesgo la salud o la vida de la mujer y en los casos en que sea producto de una violación”, afirmó el área de salud bonaerense. El fallo FAL de la Corte Suprema ratificó en 2012 los causales legales, al autorizar un aborto no punible para una adolescente de 15 años que había quedado embarazada tras ser violada por su padrastro. El misoprostol forma parte del “Protocolo para la atención integral de las personas con derecho a la interrupción legal del embarazo” al que Buenos Aires adhirió a principio de enero.
Origen: Mirada Profesional