Esencia y estrategia inorgánica

De la lista de medicamentos esenciales de la organización mundial de la salud (OMS), aproximadamente treinta (30) destacan por su naturaleza especifica, son inorgánicos, es decir en su estructura molecular no hay la presencia de carbono orgánico y su origen no es a partir de la materia viva, sino que son de origen mineral o sintetizados de manera parcial o total en laboratorios. Se considera útil dividirlos de acuerdo con su acción terapéutica, en la línea de antiácidos se tienen al hidróxido de aluminio, hidróxido de magnesio (Synax®, Dicigel®, NeutroX®) y Carbonato de calcio (Tums®, Aplacal®, Frutacid®); antisépticos tópicos como el permanganato de potasio y oxido de zinc (OverSkin®, Lanolzinc®); antídotos como el carbón activado (Carbotural®), nitrito de sodio (Nithiodote®), tiosulfato de sodio (Pedmark®); Azul de Prusia o ferrocianuro férrico (Antidotum Thallii-heyl®); antimicóticos como el sulfuro de selenio (Selenil®, Selsun Blue®), yoduro de potasio (Lakemed®); anticonvulsivantes como el sulfato de magnesio (Magnefusin®); antipsicóticos como el carbonato de litio (Litohem®, Licali®) anti caries como el fluoruro de sodio (casi todas las pastas dentales); alcalinizantes como el bicarbonato de sodio (Bicarnat®); citotóxicos como el cisplatino (Platol®, Adcist®), el trióxido de arsénico (Trisenof®, Varitrinox®); otros tantos se usan en sueros orales, parenterales y diversos suplementos minerales, como el cloruro de sodio, cloruro de potasio, yodo, sulfato ferroso (Sulferbel®, SulferMax), sulfato de zinc (Zincosol®, Z20®); gases como el oxígeno molecular, el óxido nitroso (anestésico); medios de contraste como el sulfato de bario (Sufocat®, Sufopaque 96%®); vasodilatadores como el nitroprusiato de sodio (Niperum®, Nucatrex®) y por ultimo pero no menos importante, porque aunque en sentido estricto no sean medicamentos, la OMS los destaca por su importancia sanitaria a ciertos insumos y materiales médicos cuya naturaleza también es inorgánica como lo son la T de cobre (SilverCare®) sales cloradas (desinfectantes) y el cemento de ionómero de vidrio (material odontológico).

Por otro lado, hay una serie de principios activos inorgánicos, que, si bien no aparecen en la lista de medicamentos esenciales de la OMS, son de amplio uso en otras latitudes y subutilizados en la farmacoterapéutica nacional, como lo son el óxido de magnesio (Sydmag 250®) alcalinizante, laxante suave y suplemento de magnesio; subcarbonato de bismuto (Klincosal®) antiácido; ácido bórico (Pelvana®, Borifem®) antiséptico vaginal entre otros usos; almagato (Almax®) y magaldrato (Briospan®) ambos usados como antiácidos, fosfato monobásico de sodio y fosfato dibásico de sodio (Fosfolit®) laxante.

Otros compuestos binarios de amplio uso como el óxido de titanio que tiene aplicaciones en dermocosmética y como excipiente al igual que el óxido de silicio (sílice). Como omitir el amplio uso de sustancias inorgánicas como excipientes en la industria farmacéutica. Se aprecia de gran utilidad que los lectores puedan aportar otras sustancias inorgánicas con usos terapéuticos e incluso otros usos medicamentosos en los compuestos ya mencionados.

Como pudo observarse es amplia y diversa la terapéutica de esta clase de medicamentos, las patologías para las cuales tienen usos, convierte su acceso en un asunto de suma importancia para la salud pública. Tomando en cuenta esto, al anhelo de garantizar la soberanía farmacéutica y a la necesidad de convertir a Venezuela en un foco regional de síntesis de medicamentos; es de notar que por cuestiones de ingeniería se considera que esta clase de medicamentos pudieran ser los pioneros en el proceso I+D para su síntesis a escala industrial en el país. Queda para el debate en los círculos científicos a nivel nacional (universidades, institutos, colegiaturas, organismos del estado, empresas privadas, etc.). Ante todo, tener en cuenta que el tema es un asunto de ingeniería y por lo tanto son estos profesionales los indicados para liderar esta clase de proyectos; a la postre quedaría por parte del sistema público de salud concientizar a los gremios médicos y farmacéuticos para el uso racional de esta clase de medicamentos en detrimento de otros fármacos de naturaleza orgánica, cuya síntesis es mucho más compleja, costosa y cuyos beneficios terapéuticos muchas veces están en tela de juicio.

Prof. Alexis Yánez, Ingeniero Químico y Farmacéutico.