KaloBios, la fabricante de medicamentos aquejada de problemas en la que Martin Shkreli asumió el control el mes pasado, busca la protección por bancarrota menos de dos semanas después de que Shkreli fuera detenido por fraude bursátil.
ARCHIVO – En imagen de archivo del 17 de diciembre de 2015, el ex gerente de fondos de cobertura Martin Shkreli es arrestado por agentes policiales en Nueva York luego de una investigación por fraude bursátil. KaloBios, la farmacéutica en la que Shkreli asumió el control en noviembre, busca la protección por bancarrota menos de dos semanas después de que Shkreli fuera detenido . Foto: Foto AP/Craig Ruttle, archivo / AP en español
Es la segunda compañía farmacéutica con vínculos con el ex gerente de fondos de cobertura que ahora enfrenta cargos no relacionados a su participación en ellas, si bien las empresas tienen sus propios problemas.
La otra, Turing Pharmaceuticals Inc., está recortando personal y busca un nuevo director general luego que Shkreli renunció a ese cargo debido a su arresto.
Bajo el control de Shkreli, Turing adquirió los derechos de un tratamiento para una inusual infección parasitaria que principalmente ataca a embarazadas y elevó el precio de cada píldora de 13,50 a 750 dólares. Eso puso a la compañía de Nueva York bajo la mira de legisladores presionados para que hicieran algo ante el disparo de los precios de las medicinas.
Una investigación del Comité Especial del Senado sobre la Vejez ahora se enfoca en Turing y otras tres farmacéuticas.
Con Shkreli a cargo, KaloBios planeó también amasar enormes ganancias en un medicamento de varias décadas de antigüedad que combate una infección parasitaria. La compañía insinuó que podría cobrar decenas de miles de dólares por una ronda de tratamiento, si bien el precio real podría haber sido un vale del gobierno que potencialmente valdría cientos de millones de dólares.
Cuando se reveló en noviembre que Shkreli había adquirido una participación que le daba el control en KaloBios, compañía que cotiza en bolsa y que realizaba investigación sobre tratamientos contra el cáncer, sus acciones aumentaron 20% en un día. La empresa ya enfrentaba problemas antes de ese día.
Dos semanas después de que él se convirtiera en su director general, KaloBios accedió comprar los derechos en Estados Unidos de benzinidazol, que es usado para tratar una infección parasítica llamada enfermedad de Chagas. El benzinidazol nunca fue aprobado en Estados Unidos porque la enfermedad de Chagas no es común en el país, aunque el número de casos va en aumento.
La compañía del sur de San Francisco, California, informó que planeaba obtener una rápida aprobación de venta para el benzinidazol sin tener que realizar costosos estudios clínicos, e indicó que deseaba fijar un precio similar a los nuevos medicamentos para combatir la hepatitis C, que cuestan alrededor de 1.000 dólares por píldora, o más de 80.000 dólares por una ronda de tratamiento.