Plantas Medicinales y Fitoterapia
La Fitoterapia estudia la utilización de plantas medicinales para prevenir, aliviar o curar enfermedades.
La palabra Fitoterapia procede del griego “fyton”, planta, vegetal y “therapeia”, terapia. La Fitoterapia estudia la utilización de plantas medicinales y sus derivados con finalidad terapéutica, ya sea para prevenir, para aliviar o para curar enfermedades. Las plantas medicinales nos proporcionan principios activos con actividad farmacológica que se utilizan para una determinada acción terapéutica.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Medicina Tradicional es todo el conjunto de conocimientos, aptitudes y prácticas, basados en teorías, creencias y experiencias indígenas de las diferentes culturas, sean o no explicables, usados para el mantenimiento de la salud, así como para la prevención, el diagnóstico, la mejora o el tratamiento de enfermedades físicas o mentales.
Podríamos decir que nos referimos a técnicas que pueden ser utilizadas como tratamiento alternativo o complementario al que otorga la medicina convencional. Están basadas en métodos ancestrales, con técnicas que utilizan elementos naturales, y bajo un enfoque holístico, para restablecer la salud del individuo sin ningún tipo de efectos nocivos para su organismo.
Las Terapias Alternativas o técnicas alternativas, conforman, en líneas generales, aquel conjunto de prácticas o técnicas, orientadas a mejorar la salud, pero que no se catalogan dentro de la medicina convencional occidental o medicina alopática, denominada así por los homeópatas y los defensores de otras formas de medicina alternativa.
Cuando hablamos de Terapias Naturales o Terapias Alternativas nos referimos a todos aquellos tratamientos que No “encajan” en la práctica estándar de la medicina convencional. Sin embargo cuando el uso de esas técnicas ha ido creciendo y se ha ido generalizando, llegando a ser usadas por la medicina convencional, hablamos de Terapias Complementarias. Estas terapias están en auge desde los año 70.
Entonces, la Fitoterapia es una Terapia Alternativa y una Terapia Complementaria puesto que muchos fármacos que utiliza la medicina convencional tienen principios activos procedentes de las plantas medicinales, cómo es el caso del Sauce blanco, salix alba L, que contiene una sustancia llamada, ácido salicílico, considerada el precursor de la famosa aspirina, de propiedades antiinflamatorias, analgésicas, febrífugas y antirreumáticas entre otras.
Desde la Antigüedad hay indicios del empleo de Plantas Medicinales para combatir la enfermedad. Es tan antiguo su uso y consumo como la humanidad. Nuestros antepasados aprovechaban su entorno natural, a falta de paracetamol, penicilina y otros químicos modernos. En los yacimientos de Atapuerca, en Burgos, hay evidencias de pólenes fosilizados de frutos del almez desde hace 800.000 años que acompañaban a las comidas cuando el menú era carne humana.
Hay multitud de Plantas Medicinales propias de cada cultura. Aunque la Fitoterapia China comparte algunas con nosotros como la Artemisa y el Diente de León, tiene un amplio abanico en general desconocidas para nosotros y no fácil de conseguir. Incluso dentro de Europa, las distintas características climáticas, hacen de nuestro continente una zona rica en la cultura de Plantas Medicinales, su uso y consumo tradicional.
El naturalista Carlos Linneo en 1753, introdujo un método de nomenclatura botánica y clasificación de plantas que ha obtenido aceptación universal. Cada planta tiene un nombre compuesto por dos palabras: la primera corresponde al GÉNERO, viene del latín y es un sustantivo; la segunda corresponde a la ESPECIE, es un adjetivo que describe alguna característica de la planta; detrás hay una letra, inicial de quién descubrió la planta.
Las Plantas Medicinales pueden agruparse en función de sus propiedades: relajantes, digestivas, febrífugas, antiinflamatorias, antiespasmódicas, venotónicas, inmunoestimulantes,… o en base a las patologías que queramos tratar: Problemas circulatorios, infecciones de las vías respiratorias, gases, dolores menstruales,infecciones de orina, síntomas de menopausia… Puede utilizarse una sola planta o varias de mismas propiedades para potenciar sus efectos.
Vamos viendo en cada planta del mes cómo de cada planta medicinal se utilizan unas partes dónde están los principios activos: raíz, hojas, flores, semillas, frutos,… y que el tiempo al fuego no es el mismo para cada una de las partes, a veces basta con llevar a ebullición y otras hay que hacer una decocción. Iremos hablando sobre ello, al igual que las diferentes formas de presentación de las plantas medicinales: extractos, cápsulas, comprimidos,…
Hay plantas muy populares y de uso muy extendido como la manzanilla, tila, té, menta-poleo… que solemos consumir con frecuencia y hay otras muy indicadas para los cambios de estación, como diente de león y cola de caballo, de las cuales iremos hablando. Los cambios de estación son un momento óptimo, tanto para depurar el organismo, cómo para preparar sus defensas.
A modo de curiosidad añadir que hay muchos otros posibles usos que podemos dar a las plantas medicinales, puesto que la creatividad no tiene límites. Os dejo algunos ejemplos: sales de baño de lavanda, rosas, malva,… marcapáginas para libros, bolsas aromáticas para armarios de manzanilla, azahar, espliego,… y por supuesto como condimento culinario.
Siempre hay que hacer un uso y consumo responsable de las plantas medicinales. Informarse de sus propiedades, su toxicidad si la tuviese y posibles efectos secundarios.